miércoles, octubre 18, 2006

Libro en formato digital sobre divulgación matemática

Adrian Paenza (n. Buenos Aires, 9 de mayo 1949) es un periodista y doctor en ciencias matemáticas por la facultad de exactas de Buenos Aíres . Durante 11 años fué profesor titular del Dpto. de matemáticas de la misma universidad. En 1997 ganó el Premio Konex. En su labor divulgativa ha publicado en diversos medios, colaborando en programas de televisión, alguno de los cuales ha sido galardonado con el Premio Martín Fierro. Este autor, ha a puesto a disposición del público la versión digital completa de su libro editado hace 1 año "Matemática...¿estás ahí?". Este libro sigue la línea de divulgación de dicho autor, en la cual con toda sencillez, expone algunas curiosidades científicas, así como teoría de números, números grandes, concepto de infinito, conjetura Goldbach, probabilidad, personajes matemáticos...En definitiva, es de alabar que el autor haya puesto a disposición del público la versión digital de su libro. Por mi parte, animo a adquirir el libro en formato impreso para compensar el esfuerzo que ha realizado dicho autor con la publicación digital.
Para descargar el libro en formato digital para uso personal, pulsa aquí.

martes, octubre 10, 2006

Surcos en la Luna



En esta foto obtenida con medios propios se observan las fisuras (rimas) o surcos en la Luna (línea marcada en la fotografía). Éstas se descubrieron por primera vez hace 200 años y se conocen tres tipos de fisuras, en función de su forma geométrica: sinuosas (con muchas curvas), arquedas (como la foto) y las lineales. Algunas se extienden cientos de kilómetros y se cree que, como en el caso de las rimas sinuosas, son debidas a antiguos flujos de lava, desconociéndose hasta el momento, el origen de las arqueadas y las lineales. La rima de la foto ha sido obtenida con telescopio newtoniano en la zona del Mar Nubium, radicando el origen de la fisura en el cráter Tycho, producto del impacto de un meteorito.

jueves, septiembre 28, 2006

¿Las fuerzas de la Naturaleza modificadas por el ser humano?



Los intentos por controlar las fuerzas de la Naturaleza no son nuevos. Ya en pasadas épocas se trataba de utilizar éstas para distintas causas, incluido como un arma arrojadiza. Prueba de ello fue por ejemplo, el desbordamiento por el ejército castellano del río Ebro en la toma de Logroño para anegar el campamento francés durante la invasión de Navarra (siglo XVI). Más elaboradas y ya situados en el siglo XX, se sabe del empleo del yoduro de plata en la generación de nubes o la utilización de la ionosfera.
Investigadores de General Electric descubrieron que existe una gran similitud entre la estructura cristalina del yoduro de y la del hielo, ya que según la teoría de la epitaxis, dos minerales con elementos químicos distintos que posean cierta compatibilidad estructural, sus cristales pueden unirse en determinadas direcciones. De ahí pensaron que gracias a esta propiedad, el yoduro de plata podría utilizarse como núcleo de condensación, provocando la producción de cristales y generando lluvia por precipitación. Actualmente se utiliza este compuesto en aeropuertos, para eliminar la niebla a ras de suelo y evitar así el cierre de los mismos. También se ha demostrado su eficacia en nubes cuya temperatura está alrededor de los –4ºC para provocar lluvia, por el contrario para la producción de hielo seco solo es eficaz a –40ºC. En la década de los 50-60 en EEUU se creo el Proyecto Cirrus con el objeto de realizar estas modificaciones sobre el clima, obteniendo lluvias moderadas. También se ha investigado sobre el uso de otros materiales higroscópicos (cloruro sódico, urea...) que puedan servir como núcleo de condensación (<20 micras) en nubes cálidas (por encima 0ºC) o incluso inyectar agua pulverizada a presión contra las nubes, generando un tamaño de gotas suficientes para provocar lluvia. A día de hoy, países como Argentina, Marruecos, España, Israel, tienen interés en estas técnicas.
Respecto a la utilización de la ionosfera, ya una de las figuras más eminentes de la física, Nicola Tesla (1856-1943), ideó un sistema de transmisión sin cables basándose en las ondas electromagnéticas como medio de transmisión energética. Dicho sistema usaba la ionosfera para conducir la electricidad, utilizando ciclos de baja frecuencia 6 Hz emitidos por una torre, basándose en la Resonancia de Schumann. Ésta es debida a un conjunto de picos de muy baja frecuencia (ELF) del espectro radioeléctrico de la Tierra, ya que el espacio físico entre la superficie terrestre y la ionosfera (unos 50 km) actúa como si fuese una estructura física que guiase ondas electromagnéticas, llamada guía de onda, la cual debido a las limitaciones físicas terrestres, actúa como cavidad resonante para las ondas electromagnéticas en la banda de muy baja frecuencia (ELF). La frecuencia más baja y a la cual debido a la resonancia, la intensidad es más alta, se ha comprobado que es de 7,83 Hz (estas ondas vibran en la misma frecuencia que las ondas cerebrales de los seres humanos y de todos los mamíferos) y no 6 Hz como calculó Tesla, de ahí que éste tuviese que utilizar enormes potencias para sus experimentos. Sobre esto circulan algunas anécdotas donde se le relaciona con la explosión de 1908 en Tunguska (Siberia) y sobre la cual hasta el momento hay muchas hipótesis abiertas, pero ninguna conclusión sobre el origen de la misma. A modo de curiosidad, la cavidad resonante es excitada de forma natural por los relámpagos, y también debe ser tenida en cuenta en el diseño de redes de transmisión eléctrica, ya que un armónico de la frecuencia ELF (entorno a los 60 Hz) provoca problemas en la distribución de la misma.
Pues en sintonia con esta idea de transmisión de energía existen noticias de un proyecto denominado HARRP (High Frequency Advanced Auroral Research Proyect), consistente en 180 antenas orientadas a las capas altas de la atmósfera y con el objetivo de funcionar como una sola emitiendo ondas de alta frecuencia. Estas ondas al impactar con toda su carga energética contra las capas altas de la atmósfera, cambian el medio, creando ondas de baja frecuencia y muy baja frecuencia. De esta forma las antenas al emitir estas ondas a las capas altas de la atmósfera, hay opiniones que creen que afectaría a las grandes corrientes eléctricas que fluyen a esas alturas y que son generadoras de las perturbaciones magnéticas que dan origen a las auroras boreales, conocidos como electrojets aurorales. Según algunas opiniones, estas antenas tendrían como objetivo acercar los electrojets a la Tierra para utilizarlos a modo de gran estación generadora, afectando así al clima, tal y como ocurre cuando durante el transcurso de una tormenta, llegan a entrar en contacto con la superficie terrestre, afectando a los sistemas eléctricos y de comunicaciones. Existen teorías sobre el calentamiento que puede suponer para la ionosfera el comunicar grandes cantidades de energía y los negativos efectos que puede generar para el clima, así como la manipulación del mismo presentando un panorama apocalíptico, ya que con determinados usos podría lo mismo intensificar lluvias en zonas secas del planeta como generar devastadoras tormentas, calentamiento de una zona concreta del planeta para aprovechas tierras de cultivo o prolongar sequías en lugares áridos y con mayores problemas de abastecimiento de agua.Una vez más, depende del uso que se de, pero en mi opinión respecto al yoduro de plata me sorprende no haber localizado ningún artículo sobre la contaminación provocada por la precipitación del yoduro de plata; y en relación a los efectos de alta concentración energética en las capas altas de la atmósfera, recuerdo la teoría de estudio del clima que dieron origen a la teoría de los sistemas caóticos.

Fuentes:


martes, septiembre 26, 2006

Nuevos avances en células solares

Recientes avances en el estudio de algunos polímeros pueden provocar a corto plazo un cambio sustancial en los materiales empleados en la construcción de paneles solares. Como es sabido estos utilizan como elemento base, el cual debido a su uso en la industria electrónica, encarece a priori (aunque posteriormente se recupere la inversión realizada) el precio de las instalaciones solares, además de los inconvenientes generados por la rigidez (aunque ya hay membranas flexibles) y extensión necesaria de dichos paneles.
Hasta ahora, se consideraba que una célula solar basada en silicio era eficiente si convierta más del 10% de la energía recibida en electricidad, elevando algunos sus valores un poco por encima de este requerimiento, por contra las investigaciones que había en marcha con polímeros, consiguieron que algunas células llegaran al 3%-4%.
El cálculo del facto de rendimiento se realiza dividiendo el valor de potencia máxima de la radiación recibida por la célula solar, por la cantidad de irradiancia (en W/m2) obtenida en las condiciones estándares de medida multiplicada por la superficie de la célula (en m2).
Aunque el rendimiento de las células de silicio varía bastante (entre el 6% aportado por células de silicio amorfo y el 30% en células multi-unión de laboratorios de investigación), la eficiencia de conversión que se suele obtener en las células disponibles comercialmente (silicio monocristalino) está alrededor del 12% que indicaba más arriba. Por el contrario, las células con alto rendimiento (30%) no son comercialmente satisfactorias, ya que el empleo de materiales tales como el arseniuro de galio o el seleniuro de indio, producidos en pequeña escala, encarece la célula hasta 100 veces más que los de silicio amorfo.
El nuevo polímero está basado en utilizar nanotubos de carbono de pared sencilla como puntos cuánticos (estructura cristalina a nanoescala que puede transformar la luz) con una longitud de 3-4 nanómetros, y combinarlos con un polímero, creando un material plástico que además de captar luz del espectro visible, capta también el espectro infrarrojo, aumentando así el rendimiento debido al aumento de espectro electromagnético. En estas condiciones sería posible llegar a un 30% de rendimiento.
Ventajas, en principio parece ser que hay muchas, desde el empleo de este material plástico en pinturas de fachadas y aprovechar como un gran panel solar la fachada de un edificio, pasando por el “mar de plástico almeriense” o recargar las baterías de móviles y demás instrumentos portátiles con camisetas que contengan este material.

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miércoles, agosto 30, 2006

Primera planta eléctrica que aprovecha energía de las olas en Santoña (Cantabria).

Se trata de la 1ª planta en este tipo de Europa y está impulsada por Iberdrola en colaboración con la empresa Ocean Power Technologies(OPT) . Consiste básicamente en una red de 10 boyas eléctricas sobre una superficie de 2000 m2 que suministrará electricidad a 1500 usuarios de la localidad cántabra utilizando la energía mecánica generada por las olas del mar.
El proyecto original está dotado con casi 3 millones de euros y será llevado a cabo por una sociedad de la que formarán parte: Iberdrola, OPT, Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía (IDAE) y SODECAN.
La planta productora de energía se situará a 1 milla marina del Faro del Pescador, ocupando un rectángulo de 100x20 metros, uniéndose al fondo por un sistema de anclaje situada a unos 30 metros. La potencia original será de unos 125 Kw x unidad, algo similar a los primeros generadores marinos, estando previsto subir hasta los 250 Kw x unidad.
En esencia, el sistema trata de convertir la energía mecánica contenida en las olas, ya que éstas debido a sus componentes transversales como longitudinales, obligan a la boya eléctrico a desplazarse arriba/abajo (principalmente) y adelante/atrás (evitable gracias al anclaje). Debido a las peculiaridades de la costa cántabra, hace que la oscilación eleve las boyas entre 1-5 metros. Dicha boya eléctrica al descender empuja un pistón, el cual incide sobre un generador eléctrico de corriente alterna, la cual se transforma en cc de alto voltaje, transmitiéndose al litoral mediante un cable submarino estándar de pequeño diámetro.
En la superficie no existiría impacto visual alguno, ya que solamente sobresalen las balizas que señalan las boyas eléctricas, las cuales, tanto ellas como el resto de dispositivos de generación de energía (incluido el cable de transmisión) están dentro de recintos aislados, con el objetivo de prevenir cualquier pérdida eléctrica o emisiones de campos electromagnéticos. Estas boyas eléctricas no causan ningún problema en las zonas de pesca, ya que las mismas sirven como filón artificial, atrayendo a los pescados y otras especies marinas.
Por otra parte, la boya se sujeta al fondo con un sistema de anclaje, el cual evita daños al lecho marino.
La utilización del mar como fuente de energía limpia data de los años 70 (Reino Unido y Japón), no obstante, las limitaciones tecnológicas y los costes de los proyectos paralizaron las investigaciones hasta la década de los 90.
Existen 2 formas principalmente de obtener energía del mar: las mareas (energía mareomotriz) y las olas. Sobre estas últimas, existen en la actualidad hasta una docena de métodos de extracción de energía, estando todos basados principalmente en los movimientos longitudinales y transversales del oleaje.
Fuente: Ocean Power Technologies

lunes, agosto 21, 2006

Restos arqueológicos de Yonaguni


Localización

Yonaguni es una isla que es parte del Archipiélago de Ryûkyû (Japón), localizada a 300 millas (480 km) al suroeste de Okinawa y situada también al oriente de Taiwán. Tiene una superficie de 28,88 Km y alrededor de unos 1800 habitantes. La temperatura media anual es de 23,9 ºC, con unas precipitaciones anuales de 3000 mm. Sus habitantes tienen idioma propio al margen del japonés (Yonaguni).


Breve historia

Durante la última glaciación (Würm) situada cronológicamente entre 80.000 a 10.000 años (fin del Pleistoceno), Yonaguni estaba unida al continente. Hasta el s.XII no existen muchas noticias sobre la misma, incorporándose al reino de Ryûkyû y luego en el 1609, se anexionó al feudo japonés de Satsuna. Para 1879, la isla fue incorporado de manera formal al país y de 1945 a 1972 fueron ocupadas por Estados Unidos, posteriormente fueron devueltas a Japón, formando parte de la prefectura de Okinawa.

Descripción

En 1985 un submarinista japonés (Kihachiro Aratake) descubrió, por casualidad, durante una inmersión un conjunto megalítico, el cual, asomaba sobre la superfice del mar durante la última glaciación. Posteriormente, un grupo de científicos de la Unversidad de Ryukyu (Misaki Kimura), confirmaron la existencia de los vestigios, observando que en su superficie existen formas que parecen haber sido talladas por el hombre.

Sobre el origen de dicho megalito existe mucha controversia, ya que existen opiniones que defienden que dicha estructura son simplemente caprichosas formas de la naturaleza; por contra, otros sostienen que existen datos para afirmar que son construcciones realizadas hace unos 10.000 años., lo que la convertiría en la estructura arquitectónica más antigua conocida, muy anterior a las primeras edificaciones de Mesopotamia, Egipto, India y China. Del estudio del profesor Kimura se desprende que en ambas hipótesis existe algo de cierto, es decir, que la estructura natural fue en alguna época modificada por el hombre. Concretamente, una estructura con forma de túnel de 1,2 metros de alto, que forma parte de una grieta en la piedra, hubiera representado un formidable obstáculo para acceder al resto de la estructura cuando ésta no estaba bajo el agua. La grieta también es muy peculiar, puesto que está compuesta por piedra calcárea, que debió de ser transportada, dado que no hay de este tipo de piedra en la región. Dos orificios circulares adyacentes de aproximadamente 2 m de profundidad no concuerdan con el resto de la estructura, de manera que se piensa fueron tallados, descartando cualquier tipo de erosión. Su uso pudo ser el almacenamiento de agua (otras hipótesis apuntan que pueden ser las bases para pilares de algún tipo). Hacia un extremo del monumento se encuentra una piedra ovalada que tampoco parece concordar con el conjunto. Su extremo superior apunta hacia el norte y podría haberse utilizado para determinar la hora del día. Para la talla de la roca, realizada antes de la invención de utensilios metálicos, se cree que se utilizaron cuñas de madera, que permitieron desprender limpiamente partes de la roca.

Desgraciadamente, el 4 de mayo de 1998, partes de la isla y del monumento fueron destruidas parcialmente por un terremoto submarino. Posteriormente, se realizaron filmaciones submarinas y se observó nuevas estructuras que el terremoto había dejado al descubierto, descubriendo nuevas estructuras no vistas anteriormente y las cuales poseian formas similares a los Zigurats de Mesopotamia, con características extraordinarias, las cuales han creado desconcierto, cuestionando la cronología de la historia de la Humanidad, ya que estaríamos ante las estructuras más antiguas realizadas por el ser humano, al ser datados estos zigurats en el 8.000 aC. En estas recientes exploraciones acuáticas, usando robots, análisis simples de rocas, y una serie de observaciones subacuáticas tripuladas y no tripuladas, fueron descubiertos unos puentes de tierra, situando el origen de los mismos al final del Pleistoceno, conectando el archipiélago de las pequeñas islas de Ryukyu con las tierras de continentales de China, los cuales tienen su origen en la última glaciación, ya que el nivel del mar era más bajo que el actual a causa de la acumulación de hielo en las zonas templadas. De esta forma se conectó Taiwán, Okinawa y Amani Oshime, con el área de Kyushu, uniéndolas al continente. También se descubrieron una serie de formaciones topográficas, las cuales por su morfología pueden haber sido parte de algún tipo de recinto religioso.

Una de las últimas filmaciones (junio del 98) de estas estructuras rocosas, muestran una enorme formación piramidal de 80 m. de largo cerca de la isla de Yonaguni, apareciendo también algunas estructuras con 25 metros de alto, con ángulos rectos muy logrados y escaleras enclavadas en la roca. Otras se encuentran a sólo 10 metros de la superficie de las aguas.

Respecto a los constructores, se estima que debieron pertenecer a una civilización tan avanzada tecnológicamente como las conocidas en la antigüedad después del IV milenio aC (Sumer, Egipto, China...). Se descarta atribuir su construcción al reino de Ryukyu, ya que históricamente, éste es muy posterior (siglos XII-XVII), y hasta ahora no se han descubierto las herramientas con que se han construido las estructuras y sus dimensiones son comparadas con las pirámides de Egipto, Mesopotamia, México y Perú. También se han encontrado agujeros en las cimas de las estructuras cuya función es dar cimiento a los postes de madera que soportaban el techo.

Al margen de la arqueologóa oficial, desde el punto de vista de los geólogos (Teruaki Oshii), coinciden en situar el origen de las edificaciones anterior al final de la última glaciación, ya que en opinión del profesor Oshii, fueron construidas aprovechando algunas formaciones geológicas preexistentes, existiendo conexiones interestructurales que posteriormente fueron destruidas por sucesivos seísmos, ya que hay que tener que Yonaguni está situada en una de las zonas geológicamente hablando, más inestables del planeta (falla telúrica), denotando dichas conexiones interestructurales un gran nivel de organización.